Y ser...

Y ser de carne, carne seca,
de hielo, sin derretirse.
Y ser de hechos y conclusiones,
de presentes y futuros.

Sin ser de aquí o allá,
de ningún lugar en especial.
Y ser de soledad infinita,
de espacios sin sentido convexo.
Y ser llena de espirales e ilusiones...
de libros y razones.

Sin ser de palo e irracional,
puedo continuar sin mirar atrás,
y ser de alas grandes y expansibles,
de volar y volar, sin lugar a llegar.

Y ser de aire y hojas,
de caminar sin ver, o quizá sin ser.
Y ser sin ser la que creo fui,
de ser quien soy sin reconocerme, sin sentir.

Sin ser de nadie en especial, salvo de la inmensidad,
de ir en brazos y brazos,
de miradas expectantes y brillantes,
de llorar sin lagrimas,
de confiarse al despacho que controla el ayer.

Y ser de locuras consumadas,
de sexos iracundos y caricias delicadas,
de amores incurables que deshidratan,
de consortes que buscan un pedazo de la nada.
Sin ser de sonrisas deslumbrantes,
porque el pasado se las llevo también.

Y ser, ¿Quien soy?
¿La misma de ayer?
¿La que se ve al espejo?
¿Soy yo acaso la que muere todos los días?
Y ser, tal vez no soy.
No soy de carne seca y débil,
soy hecha de roble y sequedad.
Ser de cuerpos atrapados, quejidos claudicados.
Ser, ser. y dejar de ser.


-Shaddy.